Por ir buscando en la vida
la verdad de la razón,
he tenido que enfrentarme
y he salido perdedor.

Fui un hombre de firmeza
de conciencia y de valor.
Ya me encuentro muy maltrecho
por defender el amor.
Por defender la verdad
que es mi ser y condición,
he tenido enfrentamientos
hiriendo mi corazón.

Triste es mi caminar
por la senda sin salida,
por amar sacrificar
el tesoro de la vida,
teniendo que claudicar
la verdad por la mentira.