Vamos, vamos, cariñito,
que tenemos que viajar,
al sitio donde nací
en busca de un manantial,
que se encuentra mas arriba
de los campos de San Juan.

Allí se encuentra una fuente
con su agüita transparente
saliendo de un matorral,
a la orilla de un camino
del servicio forestal,
sus chorros son más hermosos
que la plata y el coral,
yo creo firmemente
que son parte del maná,
que Dios con su inmenso amor
nunca dejó de enviar,
y surge espontáneamente
en la tierra o en el mar.

Vamos, vamos, cariñito,
que te vas a refrescar,
y yo beberé también
para que cure mi mal.