Cuando busquéis hijos míos
si es que buscáis la verdad,
buscarla en la inocencia
porque es allí donde está.
Si buscáis sabiduría
buscarla en la humildad,
donde siempre está escondida
sin exhibirse jamás.
Apartaos hijos míos
de toda la vanidad,
de su pariente el orgullo
si queréis vivir en paz.
Si queréis vivir contentos
mirar también para atrás,
porque es la única forma
de tener conformidad.
Todos somos herederos
igual del bien que del mal,
lo que nosotros sembremos
es lo que habrá que segar.