Cuando me acuesto de noche
y abro el libro del pensar,
yo me duermo muy contento
siendo río y tú la mar.

Sueño con ser marinero
y en tus senos navegar,
hacer contigo un crucero
en el fondo de tu mar.

Para sembrar un lucero
en tus piernas de coral
que con la gracia del cielo
sea un consuelo terrenal.

Para el bien del mundo entero
y del hombre en general,
de esos que hay que se niegan
a pensar y a soñar.