Envidia de la semilla
que siempre tuvo a la flor,
es la misma que tiene
el barro al constructor.
Principio de la mentira
que va engendrando el dolor,
que toda semilla tiene
por envidiar a su flor.
No te conformas semilla
siendo vínculo de amor,
que vas sembrando la envidia
la mentira y el dolor.
Por no aceptar que tu eres
la semilla de la flor,
de una de las maravillas
del Supremo Constructor.