La locura de los hombres,
la enfermedad del momento,
es porque el hombre no acepta
a Dios que lleva dentro.
¡Qué gozada que es andar
si te va empujando el viento!,
¡qué penoso es andar
contra cualquier elemento!.
La necedad de los hombres
tiene castigo muy lento.
La locura de otros tiempo,
la depresión del momento.
¿No es locura caminar
contra el agua o contra el viento?.
Más locura es no aceptar
la ley que se lleva dentro.
¿Por qué te empeñas amigo
de andar en contra del viento,
de la corriente del agua
si tu llevas parte dentro?.
¿Por qué te empeñas amigo
de andar en contra del viento,
de la corriente del agua
si tú llevas parte dentro?.
¡Hasta las piedras de un monte
aceptan al monte sin verlo!.
¡Aunque la piedra no habla
tiene entendimiento dentro!.
¡Depresión, contradicción,
el caminar del infierno!.
¡Sin motivo ni razón
el diablo se instala dentro!.
¡Depresión, contradicción,
del bien que se lleva dentro!.
¡De un Dios que no se ve
y que es preciso entenderlo!.
Amigo ponte a favor
de tu agua y de tu viento,
de tu tierra y de tu sol,
y habrás vencido tu tormento
de locura o depresión,
o enfermedad del momento.
El que se empeña en andar
enfrentado a su corriente,
su actitud será fatal
y su castigo inminente.