Engreído de valiente
piensas que eres el mejor,
respeta un poco a la gente
y teme un poco a tu Dios.

Siempre habrá quien te supere
el que tenga más amor,
es la mejor medida
de las cosas de valor.

Hay veces que los primeros
tropiezan con lo peor,
nunca podrá haber fruto
donde nunca hubo flor.