En defensa de las vacas
de las viñas y el limón,
y al resto de productos
de nuestro suelo español.
No votemos a los políticos
que nos traen la perdición,
porque nos dejan sin leche,
sin estiércol ni calor,
y nos quitan la alegría
de nuestro vino español.
No digamos de los peces,
el tomate y el melón,
y de nuestros transportistas
que les paran el camión.
Mientras el paro galopa
y aumenta la corrupción,
se alimenta el terrorismo
y se pierde la ilusión.
Por eso en verso os digo
a todo el pueblo español,
al causante de los males
¡puerta, puerta, por favor!.